Esta entrevista apareció por primera vez publicada en New Humanist. Volume 113. No 2. Junio 1998.
Anwar Shaikh nació siendo musulmán. Ahora vive en Gran Bretaña y ha publicado cuatro libros sobre los peligros del fanatismo religioso, enfocándose principalmente en el Islam. La entrevista de Ibn al Warraq con Shaikhy revela las dificultades que Shaikh tuvo con sus creencias y que lo hizo ser humanista.
El sábado 21 de octubre de 1995 aparecieron los siguientes titulares en el diario, The Daily Sadaqat, en Lahore, Pakistán:
‘Todos los clérigos pakistaníes exigen la extradición del renegado Anwar Shaikh de Gran Bretaña para ahorcarlo públicamente.’
‘Un renegado debe ser asesinado -esta es una regla fundamental de la ley islámica- Anwar Shaikh debe ser regresado, algún amante del Profeta va a matarlo- América protege a todos los que insultan al Profeta.’
Si él (Anwar Shaikh) no es eliminado, más Rushdies aparecerán. Es un apostato para negar al cielo, al infierno, a la revelación, al Corán, al Profeta y a los ángeles. Los musulmanes del mundo están listos para destruir al renegado acusado para defender la magnificencia de su Profeta.’
En una entrevista con Tariq Ali en el Observer en octubre de 1995, Anwar dijo, ‘Lo que sea que pase ahora, moriré seguro en mis creencias humanistas y racionales y si mis escritos han alejado aunque sea a algunas personas del odio y fanatismo religioso siento que me habré redimido parcialmente, aunque nada, nada podrá traer a mis tres víctimas de vuelta a la vida.’ Al preguntarle otro periodista si esperaba morir violentamente, Anwar respondió, ‘Quiero morir honorablemente.’
Anwar Shaik ha publicado cuatro libros con sus propios recursos y están disponibles en: Principality Publishers, P. O. Box 9181 Cardiff, Great Britain. CF2 4YP.
Islam: The Arab National Movement
Eternity
Faith and Deception
Taxation and Liberty
La entrevista
Ibn al Warraq: Aquellos de nosotros que temimos que la sombra del Conflicto Rushdie caería en todos los intentos subsecuentes de criticar esta muy criticable religión tuvimos una grata sorpresa, no sin mencionar asombrados, al encontrar que alguien abiertamente se había atrevido a rechazar el fascismo religioso en la forma del Islam. Anwar Shaikh, en tres libros publicados por su propia cuenta desde febrero de 1989, la fecha de la infame fatwa contra Roshdie, denuncia al Islam con términos contundentes: ‘Eternidad’, ‘Fe y Decepción’ e ‘Islam: El Movimiento Nacional Árabe. Anwar Shaikh terminó de escribir ‘Eternidad’ mucho antes de que Roshdie apareciera en escena. No pudo publicarlo antes - por falta de medios.
Me encontré con el nombre de Shaikh por primera vez en internet, donde también obtuve su dirección. Le escribí que, por fin, había encontrado un alma gemela -un ex musulmán dispuesto a criticar su antigua religión. No me decepcioné. Me reuní con él un mes más tarde en su muy cómodo y espacioso hogar en los suburbios de Cardiff. Anwar es un hombre grande, afable de gran calidez, humor y obvia valentía. Pasando los setenta años, tiene problemas de salud, ha tenido siete operaciones del corazón y rara vez sale de su casa. No sólo me mostró su vino hecho en casa -‘¿Le gusta el vino? Ah, bien, bien, entonces usted es un verdadero humanista,’- sino insistió en que me llevara la garrafa de varios litros a Londres. Pasa mucho tiempo escribiendo, -no sólo contra el islam sino también poesía hermosa en Urdu que publica en su revista ‘Liberty’,
Anwar Shaikh se preocupa del futuro secular de Gran Bretaña. Como dijo en una entrevista en 1995. ‘Gran Bretaña es mi hogar y a menos de que se haga algo sobre el fundamentalismo musulmán va a ver una enorme quinta columna en nuestro medio. Inglaterra debe despertar. Ustedes (los británicos) pasaron cientos de años eliminando al fundamentalismo cristiano de este país. No permitan que vuelva el fundamentalismo.’
Anwar Shaikh tiene una historia personal que contar, confesar, expiar, que es fascinante, horripilante, trágica y enaltecedora al mismo tiempo. Sería una pena revelar todo de una vez. Mejor, dejaré a Anwar Shaikh narrarla lentamente en sus propias palabras, grabadas durante una entrevista el 14 de mayo de 1997.
Primeros años
Nací el primer día de junio de 1928, en una villa cerca de la ciudad de Gujrat (en el actual Pakistán). Ese día era el día de Hajj (o peregrinaje). Mi familia consideró esto un buen presagio ya que el Hajj es una de las ceremonias más sagradas del islam, así que me llamaron Hajji Muhammad. Ese fue el primer nombre que se me dio, pero también nací circuncidado, y esto era visto como un mejor presagio por lo que me cambiaron el nombre de Hajji Muhammad a Muhammad Anwar. Anwar significa: radiante. Esto fue lo que les hizo darme una buena educación islámica. Creyeron que yo estaba destinado a ser un adalid del islamismo.
Nací y crecí respirando islam. Mi madre no sólo era profundamente religiosa sino una erudita del islam. Podía recitar por lo menos la mitad del Corán de memoria. Hizo todo lo que pudo para enseñarme lo que sabía. Mi abuelo paterno era muy académico y religioso y además de eso el hermano menor de mi abuelo era un sacerdote musulmán profesional, un Mullah, así que estuve bajo su cuidado también.
Sin embargo, no me enseñaron la gramática árabe. Apenas empecé a aprender árabe en sexto año y mi maestro de árabe era casi nuestro vecino de a lado. Obtuve mi matrícula en 1946, amando por el momento al islamismo. Durante ese periodo conocí los trabajos de Hadith, las tradiciones islámicas, coleccionadas por renombrados académicos como Bukhari, Muslim, Ibn Majja y otros. También tuve la suerte de encontrar muchos libros sobre la cultura e historia árabe y el famoso comentario sobre el Corán por Maulana Abul Kalam Azad.
Lahore 1947: Independencia y…
Lamento decir que 1947 fue el periodo más oscuro de mi vida. Nos dijeron que asesinar a los que no eran musulmanes, seducir a sus esposas y quemar sus propiedades eran actos de la Jihad, la guerra santa. Jihad es la labor más sagrada de un musulmán porque le garantiza un boleto seguro al paraíso donde no menos que 72 huríes, las más hermosas vírgenes y muchachos como perlas los esperan. ¡Tal recompensa es una gran tentación!
Fue durante la primera semana de agosto de 1947, cuando fui el encargado de las cuentas en la oficina de trenes en Lahore que ví un tren llegar de Punjab del este. El tren estaba lleno de cuerpos mutilados de musulmanes, hombres, mujeres y niños. Tuvo un efecto horrendo en mí. Cuanto me fui a mi casa le pedí al Señor que no olvidara mi parte de houris y niños. Esto ocurrió en verdad, en realidad recé y luego tome un bastón y un cuchillo largo y fui a buscar no musulmanes. Esos días son recordados por los toques de queda y todos estaban aterrados de los demás. Encontré dos hombres, no musulmanes, padre e hijo. El padre tenía como 50 años o menos. Maté a los dos. Al día siguiente no fui a trabajar. Me sentía nauseabundo pero quería matar más no musulmanes. Me encontré otro no musulmán en Darabi Road y lo maté también.
Frecuentemente los recuerdos de esos terribles días me atormentan, me siento avergonzado y muchas veces he llorado lágrimas de remordimiento. Si no hubiera sido por mi fanatismo, incitado por las tradiciones islámicas, esa gente seguiría viva hoy y tal vez no sentiría la culpa que tengo.
¿Quién me dijo que el acto de Jihad, el acto de matar no musulmanes es bueno? Bueno, si usted lee el Corán, lo encontrará en cierta sura, Dios dice que ha comprado las vidas de los musulmanes a cambio de las recompensas del paraíso. Matan y se matan en este esfuerzo de guerra, y la recompensa para estos musulmanes es el paraíso y el paraíso es un jardín enorme habitado por las más hermosas vírgenes, que viven en palacios y hay innumerables muchachos como perlas para servirlos.
Escepticismo y dudas
Cuando y cómo mi escepticismo sobre el islam comenzó es un episodio muy extraño. Estaba en Rawalpindi, al norte de Pakistán, debía tener como 25 o 26 años. Un día estaba leyendo el Corán, el cual ya había leído muchas veces, por supuesto. Leí la sura 49, llamada los Apartamentos. El primer verso dice: ‘Creyentes, no actúen presuntuosamente en la presencia de dios y su apóstol. Teman a dios. Dios lo escucha todo, lo sabe todo. Creyentes, no hablen más fuerte que la voz del profeta, ni griten cuando le hablen como lo hacen entre ustedes… Aquéllos que hablen quedito en la presencia del apóstol de dios son los hombres cuyos corazones dios ha probado su piedad’. Se supone que es Alá diciendo a los fieles portarse bien frente al profeta. De repente algo me llegó como un rayo. Me pregunté, ¿por qué es necesario que Alá le diga a la gente que muestre reverencia a Mahoma? ¿Qué Mahoma no puede decirlo por sí mismo? Dios estaba actuando como sirviente de Mahoma. Esto parecía ser una observación banal, pero así es como mi mente reaccionó a esto. Llegué a la conclusión, sorpresivamente, que era el propio Mahoma que le decía a la gente como arrodillársele en nombre de Alá, como si fuera una orden de Alá. En ese momento sentí que el velo de la ignorancia se me había quitado.
Ya no estaba dispuesto a estudiar el Corán por fe. Le empecé a leer críticamente y racionalmente, y al hacerlo me di cuenta que el Corán ya no me atraía, de la manera que lo hacía, de la manera que lo había hecho en los últimos 25 años. Fue en ese tiempo que empecé a pensar sobre la naturaleza del don de la profecía. Al leer el Corán nuevamente, me pareció que el profetizar es la palanca con la que alguien se eleva al nivel de dios. No es sólo que quiere ser alabado y obedecido por la gente ordinaria sino que quiere ser más grande que dios. Si se lee el sura 33, verso 56, se verá que dice: ‘verdaderamente, dios y sus ángeles rezan por la paz del profeta.’ En cualquier otra religión, es el hombre que venera a dios, pero aquí parece que dios venera al hombre.
El momento en que empecé a leer el Corán críticamente, se convirtió en un libro completamente diferente para mí. Ahora en el Corán hay un sura llamado ‘ mujeres ‘ (sura 4), verso 80 dice que si el Corán no fuera un libro de dios contendría muchas contradicciones o inconsistencias. Así que sometí al Corán a su propia definición y encontré que todos los puntos importantes se contradecían en el mismo Corán. He escrito un libro llamado Fe y Decepción el cual demuestra todas estas contradicciones del Corán. Así que cuando se lee algo racionalmente en vez de ciegamente, como muchos de los creyentes lo hacen, los mismos versos, las mismas palabras, tendrán distintos significados. Así fue como me alejé del islam gradualmente, simplemente al leer el mismo Corán.
Cardiff
No comenté mis dudas con nadie, considerándolo un asunto personal. Entre 1947 y 1956 abrí una pequeña tienda de abarrotes, al quebrar obtuve un diploma y me convertí en un maestro altamente calificado y hasta serví por poco tiempo como director de una preparatoria. En 1956 decidí irme a Gran Bretaña y por mera casualidad terminé en Cardiff. Mis primeros tres años en Cardiff fueron realmente difíciles ya que llegué con sólo 25 libras en mi bolsillo. Era muy orgulloso para pedir dinero del seguro social -tenía que encontrar un empleo antes de que se me acabara el dinero. Fui chofer de camión por tres años. Ahorre dinero, compre una propiedad y me convertí en un mini terrateniente y gradualmente aumenté el número de casas que tenía y me pasé a la industria de la construcción. Me convertí en un promotor de bienes raíces. Tuve este negocio por lo menos 25 años y lo hice con éxito. Pero justo en el momento en el que tuve la oportunidad de ser muy rico decidí renunciar porque quería ponerme a escribir.
Me retiré 20 años antes de lo normal. Estoy contento de tener mi pensión. No me arrepiento de mi decisión, hay momentos donde tienes que juzgar si quieres hacer algo realmente constructivo, que valga la pena y sea creativo o hacer más dinero. Decidí hacer algo constructivo.
Solía estar suscrito al Freethinker y en esos tiempos no me consideraba un humanista, sino un librepensador, alguien que no sigue ninguna superstición, dice lo que piensa y al mismo tiempo respeta la opinión de los demás. Es extraño decir que estaba impresionado por el lado humanista del Rig Veda, el libro sagrado de los hindúes. Estaba impresionado por el hecho de que el Rig Veda dice que su dios, Indra, es el dios de toda la humanidad. Es el amante de toda la humanidad. Era algo inusual para mi aprender, habiendo sido creado en la tradición islámica que enseña el odio a los no musulmanes. De mi propia experiencia, me di cuenta que la humanidad es una gran familia y el propósito de la vida del hombre es cuidar a sus semejantes, mejorar sus condiciones, no importando donde estén. Así que es mi propia experiencia la que me hizo ser un humanista. Mi pasión es la humanidad, el bienestar y el avance de la humanidad.
Islam: el movimiento nacional árabe
El estudio más profundo del Corán, de Hadith y la historia árabe me hizo creer que el islam había sido inteligentemente ideado en el principio de dividir y dominar. Y su propósito es permitir a los árabes dominar al resto del mundo. No tengo duda que el profeta quisiera ponerse al mismo nivel que Alá. Mahoma amó a Arabia y a su cultura, y su único deseo era crear una fuerte nación árabe conquistadora que creyeran en él y propagaran su nombre. Esto sólo podía lograrse mediante el dominio imperial. Para este propósito tomó varios pasos; primero, dividió a la humanidad en dos grupos eternamente en guerra. Llamó a sus propios seguidores al Hezbollah, el partido de dios. Los que no lo siguieran se llamaban Hezbushaitan, el partido de satán (se encontrará esto en la sura 58).
Estarán perpetuamente en guerra y eventualmente el partido de dios emergerá victorioso. Mahoma, para hacer a los musulmanes dominantes, y ya que en ese tiempo principalmente los árabes eran musulmanes, estableció que el gobierno le pertenece sólo a la tribu Quraish, que es la propia tribu del profeta. Ninguno que no sea árabe puede encabezar un verdadero gobierno musulmán. Esta es la razón por la cual en los 800 años de historia de España, todos los gobernantes musulmanes pertenecían a la tribu Quraish, la tribu de Mahoma. Lo mismo se establece para el propio gobierno árabe. Desde hace 500 a 700 años los gobernantes vienen de las dinastías Umayyad y Abbasid. Todas pertenecen a la tribu Quraish.
La artimaña y filosofía de dividir a la humanidad en dos grupos perpetuamente en guerra, que nos recuerda al conflicto eterno de la lucha de clases de Carlos Marx, es peligroso, está basado en la fe ciega, y es más destructivo que el fascismo, ya que busca la aniquilación de todos los no musulmanes. En verdad, ve a la exterminación de todos los no musulmanes como la más grande virtud que garantiza el paraíso. El islam fue creado por el profeta para imponer valores árabes a los no árabes. Para asegurarse que los musulmanes no árabes reconocieran a los árabes como sus amos intelectuales, el profeta hizo a la Meca el centro de reverencia islámica, de tal manera que se convirtiera en una parte integral de la fe musulmana. El profeta hizo a la kaaba, el santuario en forma de cubo en la Meca, el santuario central árabe, la casa de Alá, y aseguró que el mismo Alá había ordenado a Adán, el progenitor de toda la humanidad, que construyera esta casa para Él. Ahora la belleza de esto es que la kaaba es también la qibla -la dirección de la oración. Esto significa que cada musulmán, donde sea que viva, India, Pakistán, Irán o Nigeria debe apuntar hacia Arabia, para arrodillarse en reverencia. No sólo eso, las tumbas musulmanes deben ser excavadas de tal manera que el cuerpo ya enterrado le de la cara hacia la kaaba, o sea a la Meca. Tan sagrada es la Meca que nadie debe defecar dándole la cara a la ciudad.
De nuevo, cada musulmán no importa donde viva debe hacer un peregrinaje a la Meca, suponiendo que tenga las posibilidades de hacerlo. Esta era una costumbre pre-islámica de Arabia la cual el profeta incorporó al islamismo, para traer todos los beneficios económicos que una persona pueda soñar. Han de haber leído hace algún tiempo, durante el peregrinaje, tres millones de musulmanes fueron a la Meca. Suponiendo que cada musulmán gaste de 2,000 a 3,000 libras, se pueden calcular las ganancias de esta ceremonia únicamente. Las personas en Pakistán e India son famosas por vender sus casas y sus tierras para irse de peregrinaje.
Además, Alá, habla árabe, el Corán está en árabe, el cual es un idioma muy difícil de aprender. Todos los musulmanes deben hablar árabe para ganarse las bendiciones de Alá -vean como Alá favorece a Arabia. De hecho, esta es la más efectiva artimaña para imponer la cultura árabe a los musulmanes no árabes. Esto es lo que me hizo escribir, Islam: El Movimiento Nacional Árabe, para advertir a todas las naciones del mundo los peligros que se avecinan en la era de las bombas atómicas.
Fe y engaño
Fe y Engaño es un libro que escribí para enfrentar los retos hechos por el mismo Corán. El Corán afirma que si no fuera un libro de dios estaría lleno de inconsistencias. Como ya dije analicé el Corán y todos sus preceptos principales y los anoté. Encontré que cada principio tiene su contrario.
Islam y sexualidad
Este libro, aún sin publicar, trata con la creencia musulmana de que un profeta es una persona completamente inocente e infalible. En la sura 48 versos 1 y 2, Alá le dice a Mahoma: ‘Perdonaré tus pecados del pasado y cualquier pecado que cometas en el futuro’. Ciertamente nulifica la creencia de que un profeta es inocente e infalible, porque el profeta había cometido pecados en el pasado y lo más probable es que los cometiera en el futuro, no lo podemos llamar infalible.
También en este libro, examino las vidas de media docena de profetas -y mi narración está basada en la Biblia y en el Corán. He ilustrado la vida del profeta en referencia a la sexualidad, la ley coránica y la historia. Este libro contiene algunos episodios que les pondrán los pelos de punta, están documentados en libros de tradiciones islámicas, el Hadith, el Corán y la historia árabe. No he querido publicar este libro hasta ahora, está guardado en las bóvedas del banco. Creo que este libro debe ser publicado por una sociedad, no es justo que una persona lo publique y luego sea apuñalado y nadie ponga atención al libro. Si fuera publicado por una sociedad, entonces, sabría, si estuviera o no aquí, que la misión seguiría igual. Honesta y sinceramente creo que el contenido de este libro pertenece a la gente del todo el mundo, porque romperá la columna vertebral de la religión.
El estado de la mujer bajo el Islam
El actual estado de la mujer en el mundo islámico se debe a la ley islámica y la actitud coránica. Discuto estos asuntos en Islam y Sexualidad. La verdad es que en el islam una mujer no es más que un juguete sexual. Un hombre está en la libertad de jugar con ella, y luego divorciarse de ella cuando quiera. Se le considera un testigo sin valor en un tribunal de justicia. Su hermano merece el doble de herencia que ella. Un hombre puede tener cuatro esposas al mismo tiempo, un hombre puede golpearla legalmente si ésta lo molesta. Debe estar disponible a tener relaciones sexuales cuando sea requerido. Debe observar el purdah (que se cubra la cara) y debe quedarse en la casa, no debe unirse a ninguna actividad social. Esta es la razón por la que el islam no ha producido ninguna gran mujer en los países donde viven los musulmanes. Benazir Bhutto y Tansu Ciller, de Turquía, son en verdad las marcas de rebelión contra el islam. El islam no es una religión racional porque ha reprimido los derechos de las mujeres por siglos.
La fuente de la ansiedad es la Sharia y la falta de una separación de la religión y el Estado. Hacer a la religión parte del Estado es la verdadera fuente del problema -conflictos económicos y sociales. Es desde que los europeos separaron a la religión del Estado que han dejado de hacer leyes en el nombre de Cristo, que han aprendido a ser libres y a reclamar sus derechos humanos. Hasta que algo así pase en el mundo islámico, estos países no tendrán derechos humanos, la verdad es que hay una muy débil revolución en estos países -le pagan lip-service al islam, pero se basan en leyes seculares. Hacen sus propias leyes en sus propias asambleas legislativas, pero le ponen un poco de islam. Sin embargo, no creo que lo puedan hacer por mucho tiempo. Al final del próximo siglo la magia islámica habrá desaparecido -Todos tratarán de ser racionales, en vez de hacer las cosas en nombre de dios.
Humanismo
Soy un humanista liberal. Creo en la unidad y dignidad del hombre que tienen el derecho a creer en lo que quiera. No tiene ningún derecho de imponer sus creencias a otros. La fe debe ser estrictamente un asunto personal. Creer o no en dios es subjetivo, lo que importa es la dignidad humana, la libertad humana y el bienestar humano. Un hombre amante que es ateo es mil veces mejor que un teísta que odia a sus semejantes, por convicciones religiosas. Un verdadero humanista es libre de las restricciones de raza, color y credo. El creé en los derechos humanos, las libertades civiles y los principios democráticos.
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