Rob Smith, lector del reino Unido y director técnico del
North East Regional e-Science Centre, nos habla sobre la
cadena de farmacias Boots (Véase http://www.randi.org/jr/200509/090905these.html#1
{vertraduccion;randi20050909.html}
para más información), que están intentando vender de nuevo
aceite de serpiente. Esta vez de una forma aun
más tonta que en su anterior viaje a la tierra de las
fantasías malignas. Rob nos informa:
… Se están emitiendo en el Reino Unido anuncios del
anillo del caballero Silencioso - un producto que se supone
evita los ronquidos. Hay un poco de pseudociencia ridícula
que pretende explicar como es posible esto en su página
web: http://www.silentknightring.com/.
Obsérvese que en dicha página se proclama orgullosamente que
el producto está disponible en Boots.
Esto me llamó la atención, porque en el Reino Unido, Boots es una
institución. Es la referencia y el canon de las farmacias. Ha estado
en el negocio desde siempre. Mucha gente confía en ellos. Una
búsqueda rápida me mostró otros productos “alternativos” en
su catálogo, así que les envié un correo electrónico.
Desgraciadamente, ya sea por mi enfado momentáneo o simplemente
por estupidez, cometí el error de contactar con ellos a
través de un formulario web, de forma que no dispongo
del mensaje original. En cualquier caso, he aquí su respuesta:
Gracias por ponerse en contacto con nosotros, con respecto
a su decepción por la comercialización del producto “Caballero
Silencioso” como solución alternativa para los ronquidos. Me
he puesto en contacto con nuestro equipo de cuidado de la salud
en su nombre, y a continuación le remito la respuesta que he recibido.
Boots es la primera empresa de suministros médicos en el Reino
Unido, y además de disponer de las licencias requeridas para
la prácticas de anunciar y vender tanto medicinas como
dispositivos médicos, también nos gusta poder ofrecer un
conjunto de productos curativos alternativos. Boots se
enorgullece de darle al comprador la libertad
de elegir, de forma que no sería apropiado por nuestra
parte negar al consumidor el acceso a productos
y terapias alternativas, si eso es lo que desean. La clave
es verificar que las afirmaciones hechas relativas a
estos productos sean apropiadas. Esto significa, o bien
asegurarse de que hay estudios disponibles que contrasten
los resultados, o asegurarse de que las afirmaciones
realizadas son razonables (que estén establecidas y
aceptadas en el mercado para productos iguales o similares).
Muchos de estos productos hacen afirmaciones muy débiles, o incluso
ninguna. Todos los productos que llegan por primera vez a Boots
son revisados por expertos técnicos para asegurar
tanto nuestros compromisos éticos como legales. Hay muchos
productos que nunca llegan a nuestros listados debido a
un etiquetado deficiente o a realizar afirmaciones inapropiadas.
No nos disculpamos por comerciar con productos sanitarios
alternativos, y continuaremos haciéndolo en tanto en cuanto
nuestros clientes sigan demandándolos.
Por alguna razón, esta respuesta no parecía satisfacerme,
así que respondí:
Gracias por su respuesta. Me temo que era la que
esperaba y me parece, de alguna forma, deshonesta; el
mensaje en su conjunto parece ser que que no les
importa lo más mínimo la salud de sus pacientes,
siempre y cuando les puedan vender algo.
Del texto de la respuesta parece que se sienten ustedes
muy cómodos vendiendo deliberadamente productos ineficaces
o inútiles, siempre que las compañías que los producen
no hagan afirmaciones muy serias sobre su utilidad. O
si, previamente, otras compañías han engañado al público
para endosarles productos parecidos. Para alguien que
ocupa una posición tan influyente como “la primera
empresa de suministros médicos en el Reino Unido” me
parece, la verdad, poco honrado.
En el caso concreto del anillo del Caballero Silencioso, las
afirmaciones realizadas me parecen muy fuertes; extraído
de la página web de dicho producto:
“Deje de roncar AHORA con este producto fuera de serie,
sencillamente poniéndoselo en su dedo meñique. El anillo
del Caballero Silencioso es la solución mas
natural y efectiva que se puede usar para prevenir
los ronquidos. Las investigaciones realizadas
han descubierto que pueden eliminar completamente
los ronquidos en un 60 por ciento de los usuarios, y
lo reducen considerablemente en el resto. La elevación
que se aprecia en la cara interior del anillo actúa, cuando
se posiciona adecuadamente, en uno de los meridianos
que recorren el dedo meñique del roncador. Utiliza
los antiguos principios de la acupresión [sic],
específicamente el principio de Tuina, que es una
variedad de masajes orientales procedente de China.
Es una combinación de masaje, acupresión y otras
formas de manipulación corporal”.
“Quizás haya oído hablar de la Reflexología, que
consiste en aplicar presión en manos, pies e incluso
orejas, para tratar un amplio conjunto de dolencias.
Tuino es una forma de reflexología cuya historia
antecede a la de cualquier medicina convencional
occidental en cientos de años”.
“La forma de conseguir que el anillo del Caballero
Silencioso funcione es ponérselo aproximadamente
una hora antes de ir a acostarse, posicionar
correctamente el
Estimulador de Acupresión (Se incluyen instrucciones
detalladas) y apretar ligeramente para aplicar
presión. ¡Esto es todo! ¡Tuino y el anillo trabajan
en equipo para eliminar el problema de los
ronquidos definitivamente!
Y luego, por supuesto, esta toda la típica evidencia
anecdótica en su sección de “Testimonios”. Desde
luego que parecen estar haciendo afirmaciones bien
fuertes sobre lo efectivo que es el
producto. ¿Quizá podría usted indicarme los
estudios que indican que dicha afirmación está
justificada? ¿O prefiere acogerse a la defensa de que
si el producto “está bien establecido y aceptado en el
mercado” (Signifique esto lo que signifique - a mi
me suena a la típica cláusula evasiva) entonces
las pruebas de que de verdad funcione no son necesarias?
Randi comenta: La descripción de los fabricantes del anillo del
Caballero Silencioso es tan delirante, tan infantil, y tan mal
sostenida, que tiene que asombrarnos el que alguien pueda
leerla sin reírse. Pero -y estoy seguro que nuestro
corresponsal estará de acuerdo- el hecho es que Boots
ignore esta estafa y continua ofreciendo el producto
a sus confiados compradores es realmente grave. Tenemos
que preguntarnos: ¿Quiénes son esos expertos técnicos
que Boots mantiene en su plantilla con el fin de evaluar
estos asuntos? ¿son simplemente estúpidos, o realmente
malvados de corazón?. Rob Smith continua en su
carta a Boots:
También me choca que se hable de pedir “datos” que
confirmen las afirmaciones hechas y no de “evidencias”.
La diferencia entre los dos conceptos es grande. En
el caso de los remedios, en concreto aquellos se venden
como remedios para el público general, la única evidencia
aceptable es la que se puede obtener con experimentos
controlados por el procedimiento de doble ciego. “Datos”
puede ser cualquier cosa - anécdotas, información sesgada -
cualquier cosa que alguien decida registrar. Insistir en
pedir “datos” para apoyar la venta de estos productos no
tiene sentido. Bueno … el [representante de la compañía
que vende el producto] dice que funciona, así que yo
declino toda responsabilidad.
Dice usted “No nos disculpamos por comerciar con productos sanitarios
alternativos, y continuaremos haciéndolo en tanto en cuanto
nuestros clientes sigan demandándolos”.
La razón de que estos productos sean considerados “alternativos” es
que no hay ni la más mínima evidencia de que funcionen. En caso
contrario, ya serían de uso general. Como farmacia, Boots
debería ser consciente mejor que nadie de las dificultades
que afrontan las medicinas convencionales antes de que se permita
su venta al público. En particular, deben demostrar tanto
ser efectivas como seguras, en un grado determinado por una
normativa bastante rigurosa.
No puedo creer que ustedes vendieran remedios farmacéuticos
que no hubieran pasado estos controles, así que estoy muy interesado
en que me expliquen cómo se sienten vendiendo remedios
“alternativos”, que no es que no hayan pasada los controles, es que ni
siquiera lo han intentado. Me reitero en mis sospechas de que
ustedes están vendiendo, deliberadamente, “remedios” que ustedes
saben inútiles -o, al menos, que ustedes ignoran si son efectivos. Cobran
a personas vulnerables una considerable
suma de dinero por el privilegio de comprar
remedios aparentemente inocuos y que hacen pasar por efectivos. Lo hacen sin
ninguna evidencia y usan palabras engañosas para justificarlo.
Personalmente, me gustaría que adoptaran una actitud menos egoísta, que
prestara más atención a la apremiante situación de los consumidores que
ustedes pretenden ayudar.
No me puedo creer que Boots se tomara esto en serio. Es
vergonzoso y también produce
vergüenza ajena. Utilizar una reputación ganada durante años para
aumentar las posibilidades de timar a la gente sigue
siendo bastante extraño aquí, en el Reino Unido, a pesar de lo ingenuos que
seamos a veces.
Le haré saber si Boots me responde.
Rob, todo está perfectamente explicado por Boots en su primera
respuesta: “…continuaremos [vendiendo productos medicinales
alternativos] en tanto en cuanto
nuestros clientes sigan demandándolos”. Esto nos indica no solo
que a Boots no le importa ni un comino la salud y el bienestar de sus
clientes, o la eficacia de los productos que venden, siempre
que la caja siga sonando; pero que, incluso si se les muestra
que son simples patrañas - y esta ciertamente lo es - continuarán
vendiéndolo porque es rentable. Hemos de maravillarnos de que
Boots nunca haya oído hablar del opio, la heroína o las
metanfetaminas; estoy seguro de que habrá clientes hay fuera
que “quieran comprarlas”, así que si Boots pudiera venderlas
legalmente, no tendría ninguna duda en hacerlo, no. Eso es
lo que están diciendo.
Y Rob Smith nos hará saber si Boots se toma la molestia de responder
a sus comentarios. No creo que lo hagan…
Volvemos a visitar PEAR
Mark Chu-Carroll, que se describe a si mismo como:
Un informático que trabaja en investigación en un laboratorio
corporativo. Mis intereses profesionales se centran en diseñar y construir
lenguajes de programación y herramientas que permitan a grupos de
personas trabajar conjuntamente para ensamblar grandes sistemas
de software.
Ha llamado nuestra atención. En primer lugar, les recuerdo que
hay muchas referencias archivadas en estas páginas sobre las
actividades realizadas en el PEAR
(Princeton Engineering Anomalies Research), como
por ejemplo en http://www.randi.org/jr/072905beenthere.html
{vertraduccion;randi20050729.html}.
Mark nos ofrece una explicación convincente de este tema, que
ha sido utilizado muchas veces para desafios del estilo: ¿Cómo
explica esto, señor Randi?
No tengo ningún problema en absoluto para comprender lo que está pasando
en el PEAR, pero Mark maneja el asunto con la soltura que le
da el ser un experto en la materia, por lo que me alegra poder
presentar sus conclusiones. Un extracto de sus comentarios:
…Empecé estudiando el artículo del PEAR. Como recordatorio breve,
comentar que PEAR es un grupo en la universidad de Princeton
que estudia “La interacción entre la conciencia humana y dispositivos
físicos, sistemas y procesos de medición comunes a la prácticas
de ingeniera actuales”. No hay muchos más que decir después de esto, pero
aun existen algunos argumentos que merece la pena considerar.
Considerado en conjunto, el problema con las publicaciones del PEAR
es que han generado una cantidad realmente masiva de datos, que
no contienen ninguna anomalía estadística significativa, de
ninguna clase. A pesar de ello, siguen intentado demostrar
que determinadas propiedades de los datos sufren anomalías, aun
siendo estadísticamente insignificantes. Esto es un completo
disparate; cualquier conjunto de datos, convenientemente
dividido y reordenado, contendrá subconjuntos con características
aparentemente anómalas. El propio concepto de significancia estadística gira
sobre la idea de medir si una aparente tendencia en un conjunto
de datos es, o no, lo suficientemente fuerte como para ser considerada
algo más que simple ruido.
La sección 3C es típica. He aquí lo que nos dicen en la introducción a esta sección:
Cualquier detalle estructural de los ensayos de cálculos
de distribución que aporte algo a las desviaciones anómalas
de las medias puede resultar apropiada para modelar esas
correlaciones. Aunque no hay evidencia estadística significativa
de variaciones en sesgo, desviación, kurtosis o momentos
de los valores muestreados en el conjunto completo de datos,
se puede discernir patrones regulares a una escala muy ínfima.
Esta es una afirmación extraordinariamente irrefutable. Traducido
al castellano, viene a decir que no existe nada estadísticamente
significante en los datos que nos permita concluir nada más que
el absoluto azar. Pero si seleccionamos adecuadamente un
conjunto de muestras,
descubrimos patrones interesantes.
Veamos con un ejemplo exagerado lo que, en la
práctica, significa esto. Si tomamos un conjunto de
números generados al azar,
y lo seccionamos de forma que sólo contenga múltiplos de
2 y 3, encontraremos que el nuevo subconjunto contiene
una cantidad extrañamente alta de números pares. ¿Es una anomalía
significativa? Sólo en el sentido de que ha seleccionado
el subconjunto de datos con la propiedad que me interesaba -yo
mismo creé la anomalía con mi selección - por lo que la “anomalía”
es una propiedad de mi método de selección, y no de los datos subyacentes.
La sección 3D es más o menos lo mismo:
Dada la correlación de las intenciones del operador con
las desviaciones anómalas de la media, es razonable buscar
en los datos por rasgos específicos del operador
que puedan establecer algún patrón de contribuciones
de operadores individuales al conjunto global de resultados.
Desafortunadamente, el cálculo estadísticamente cuantitativo
de los operadores resulta muy complicado por la inevitable disparidad
en los tamaños de las bases de datos de los operadores, y por
la debilidad en la relación señal-ruido de los datos, que hace que las
representaciones gráficas y analíticas de la distribución de
los efectos de operadores individuales sea sólo marginalmente esclarecedoras.
Este párrafo es interesante por un par de razones. En primer lugar,
es la admisión más directa que se puede encontrar en todo el artículo
de cuan inválidos son sus datos. Están combinando resultados de
protocolos experimentales significativamente distintos: Algunos
de los sujetos a prueba han hecho bastantes más experimentos
con el equipo que otros; pero los resultados son mezclados
como si todos fueran consistentes.
En segundo lugar, admiten abiertamente que los datos son inválidos, y que
cualquier conclusión que se pueda derivar de ellos no tendrá
sentido -pero de todas formas van a proceder a extraer
conclusiones, aun y cuando,en sus propias palabras, estas sólo
podrán ser “marginalmente esclarecedoras”. Incluso esta afirmación
resulta ridículamente atrevida. El término correcto es “sin sentido”.
La sección cuatro empieza con otra afirmación bastante divertida:
posibles correlaciones secundarias de los efectos se
acumulan con factores técnicos, psicológicos y ambientales, por
ejemplo, el tipo de generador aleatorio, la distancia entre
el operador y la máquina, el sexo del operador, dos
o más operadores colaborando, efectos de la retroalimentación,
la tasa de generación de bits, el número de bits muestreados
por intento, el numero de intentos comprendidos en una
serie de pruebas, las opciones del protocolos voluntarias
frente a las obligatorias, la experiencia del operador y
muchas otras que han sido estudiados en diferentes grados
durante la realización de los experimentos, así como en
otros informes relacionados no discutidos aquí. Muy
brevemente, una inspección cualitativa de estos datos,
junto con un análisis exhaustivo de la varianza, nos indican
que la mayoría de estos factores no alteran de manera significativa
la naturaleza o la escala de los efectos combinados de los
operadores sobre los señalados anteriormente, aunque
pueden ser de relativa importancia en los patrones de
rendimiento de ciertos operadores individuales.
Eliminado las complejidades innecesarias, esto se
traduce a: “Prácticamente todas las propiedades
del experimento varían en mayor o menor medida; los
resultados de los experimentos, por otro lado, se muestras
estadísticamente insignificantes; y cuando intentamos
separar el efecto individual de cada factor para
evaluar su influencia en los
resultados, no se pudo encontrar nada que fuera
estadísticamente significativo.”
¡Fuera, fuera, demonios de la estupidez!
Una última cita, y habré terminado con el tema para siempre.
PEAR ha sufrido frecuentes críticas de, entre otros, James Randi (También
conocido como El Asombroso Randi) por la falsedad de sus experimentos.
Una de las críticas más repetidas es, muy apropiadamente, la posibilidad
de replicación de los mismos; es decir, ¿Es posible repetir estos
experimentos, y obtener estos resultado presuntamente
anómalos, en una entorno de prueba controlado y observado
por gente que no pertenezca al PEAR?
He aquí la respuesta:
De vez en cuando, nuestros experimentos han sido valorados, tanto
formal como informalmente, por un conjunto de observadores
críticos, los cuales han estado generalmente de acuerdo
en que el equipamiento, los protocolos y el procesado de los datos
son sólidos. No obstante, es frecuente la advertencia de que
dichos resultados deberían ser “replicados” antes de ser
aceptados en su totalidad, variando el criterio de replicación
desde una estricta preservación de todos los detalles técnicos
y procedurales hasta una mayor flexibilidad, permitiendo
equipamiento y protocolos similares. En nuestra opinión, con experimentos
de este tipo, en los cuales están implicados claramente
aspectos psicológicos substanciales y, por tanto, comportamientos
estadísticos tanto individuales como colectivos, es poco
razonable exigir que los operadores
produzca resultados idénticos en diferentes días, o que
un grupo de operadores pueda reproducir cuantitativamente
los mismos
resultado que cualquier otro. resulta mucho más apropiado
usar esos criterios en experimentos controlados
sobre creatividad, percepción, aprendizaje o rendimiento
deportivo, donde los margenes estadísticos de rendimientos
individuales o colectivos son mucho más tolerantes, los
rendimientos colectivos pueden predecirse, y los resultados
obtenidos, interpretados de acuerdo a los términos habituales
en estadística.
No podemos reproducir los resultados, porque no sería juego limpio.
Por supuesto, se han realizado experimentos cuidadosamente controlados
sobre percepción, aprendizaje y rendimiento deportivo, con resultados
perfectamente reproducibles (No esto seguro sobre la
creatividad, porque no conozco ninguna definición de
“creatividad” que sea susceptible de ser cuantificada). Pero, ¡que
diablos! PEAR no va a dejar que este hecho se interponga en su
camino. Simplemente, no es razonable pedir que los resultados
sean reproducibles.
He aquí una refutación, por parte una autoridad cualificada en la
materia, de que las afirmaciones hechas por el PEAR soportan el escrutinio
crítico. Conseguir que Brenda Dunne responda a esto puede convertirse
en una tarea ciclópea, amén de estéril, ¿alguien se anima..?
“Avances” médicos en alberta
Un lector de Canadá nos informa de que en un hospital
de Alberta, el Stollery
Children’s Hospital, situado en Edmonton, siempre pendiente de
poder ofrecer a sus pacientes lo último en pseudo-medicina, ha
formado un equipo compuesto por un pediatra, un naturópata, un herbalista
(especializado en hierbas chinas), un acupunturista y
un masajista, para ofrecer
consejo a los padres de hijos desmejorados e “informarles
de terapias alternativas probadas y seguras ”
La Doctora Sunia Vohra es la pediatra del equipo. Nos explica su
punto de vista: ‘Es muy frustrante tener que responder una pregunta
con “no lo sé” o “no estoy segura”’. Bueno, doctora, aún arriesgándome
a repetirle lo que ya debería saber, a juzgar por su doctorado, la medicina
moderna tiene que decir, a veces, justamente eso, y no
contestar con respuestas definitivas, preestablecidas y resultonas, algo
que los practicantes de “medicinas” alternativas adoran hacer. Toda
ciencia es una búsqueda de respuestas, un intento organizado de obtener
una afirmación que parezca representar una verdad objetiva, y como tal
intento, debe estar sujeta a desafíos y a posibles falsificaciones.
Las “vibraciones”, el “chi”, la “energía orgónica”, las “subluxaxiones”,
los “bloques de energía”, los “chakras”, los “rayos terrestres” y
demás parafernalia ofrecida por la medicina alternativa son sólo
conceptos coloristas, mas vacíos de significado. Parecen satisfactorios
y definitivos, pero sólo sirven para mantener a los pacientes en un estado
placentero, mientras que las causas reales, a veces no completamente
entendidas, permanecen ocultas.
Cómo ya saben los lectores habituales, me estoy recuperando de una
intervención cardiaca, un bypass doble. Me morí; fui resucitado
y operado sin ningún tipo de medicina fraudulenta. Fue auténtica
ciencia en acción, probada y comprobada muchas veces antes que
me rindiera al sulfato de morfina que me ahorró
tanta incomodidad. No existía nada “alternativo” en el procedimiento
al que me vi sometido; nada de invocaciones, súplica a los dioses,
imposición de manos, raíces de formas extrañas ni talismanes
mágicos. Fue sólo ciencia -dura, vigorosa y disciplinada- haciendo
su trabajo. Nadie me prometió la vida; las estadísticas estaban
claramente a mi favor, pero no había ninguna garantía en
absoluto. Acepté la oportunidad de poner mi vida en el sistema, sabiendo
que ningún doctor es perfecto, ningún procedimiento a prueba de
fallos, y que no existía ningún resultado seguro. Escucho
a los auténticos científicos que todos los días me hacen
ejercitarme en toda clase de máquinas malvadas -y por ahora me va
muy bien.
Reglas especiales para la pseudociencia
Doug Fraser, profesor de ciencias en Ontario, Canadá, nos
recuerda que la revista The Lancet, editada por
la Asociación Médica de Gran Bretaña, publicó un
aplastante reproche a la homeopatía el pasado agosto.
Véase http://news.bbc.co.uk/2/hi/health/4183916.stm.
Pero según Doug, la mejor parte de ese artículo -que algunos
pueden haberse perdido- era la respuesta de un portavoz no identificado
de la Sociedad de Homeópatas. Afirmaba, en una frase que
no podría reflejar con más claridad la equivocada naturaleza
de la pseudociencia:
Ha sido establecido, más allá de toda duda, y aceptado
por muchos investigadores, que las pruebas realizadas
contra controles aleatorios del efecto placebo no son
apropiadas para la homeopatía.
Ridículo. Nos dice que la misma esencia de los controles, probados
y establecidos por la ciencia para la evaluación de los experimentos, son
incorrectos. Esto sorprenderá, sin duda, a cualquier científico sobre
la faz de la Tierra. El señor Freaser comenta:
Así que ya sabemos la cruda verdad directamente de la boca
de los homeópatas - las
matemáticas de los números al azar no funcionan con ellos, las
tendencias o prejuicios en investigadores y pacientes
deben mantenerse, y si se toma un remedio homeopático, este
puede no funcionar si, en algún otro lugar, alguien se ha tomado
una pastilla de goma. Es realmente duro vivir en el Universo tipo
Shirley MacLaine.
De acuerdo. Pero la homeopatía siempre ha pedido reglas especiales
por las cuales ser evaluada. Creo que un lema mejor para la Sociedad de
Homeópatas sería:
Ha sido establecido, más allá de toda duda, y aceptado
por muchos investigadores, que cuando se realizan
prueba de doble ciego convenientemente aleatorizadas
y controladas, los resultados señalan que la homeopatía
es inútil. por lo tanto, se concluye que los mecanismos
científicos normales no son adecuados para el estudio
de la homeopatía.
¿De acuerdo?
Toda la verdad sobre el sonido de alta fidelidad
De nuestro lector Aaron Drabbitt, de Victoria (Columbia
Británica), Canadá, una confesión y algunos consejos…
Hace poco envié una carta a alguien que me pedía asesoramiento
para mejorar su equipo de audio. No creo que se esperase
mi respuesta.
Empezaré advirtiéndoles de que ser un “audiófilo” tiene
tanto de fe y psicología como de electrónica y acústica.
Personalmente, he ido recorriendo todo el espectro,
desde al fundamentalista pirado de
la alta fidelidad hasta mi estado actual, de ateo del audio …
más o menos durante 27 años. Estudié ingeniería eléctrica
en el BCIT (British Columbia Institute of Technology), he incluso
estuve al cargo de un pequeño negocio de diseño de sistemas
y altavoces “a la carta”, para los más adinerados.
Más o menos el asunto se resume en esto: Oirás lo que quieras oír.
Si te gastas 2000 $ en un nuevo amplificador, oirás unas mejoras
en el sonido por valor de 2000 $, aunque es muy probable que, en una
prueba doble ciego, no fueras capaz de apreciar la diferencia. He
oído toda clase de argumentos sobre lo malos que son los test
doble ciego… pero la verdad es que lo único que hacen es
eliminar el sesgo psicológico. Eliminan la “religión” en la
reproducción de audio.
Lo que me lleva al tema del doble cableado y la doble amplificación.
No hay de que preocuparse. En realidad, no producen ninguna diferencia
que esté en proporción a su coste.
Creo que la gente obtendría mejores resultados y estaría mucho
más feliz si invirtiera la mitad de dinero que emplea en mejoras
de su equipo en acondicionar la acústica de su sala de audio. La
acústica es extremadamente importante, comprende
un 75% del programa THX. Marcará una diferencia mucho más
grande en el sonido de tu sistema que cualquier cambio en el amplificador.
Hay más magia, pseudociencia y fraude en la industria del audio
que en la consulta del quiropráctico homeópata de turno.
Si no te alcanza el presupuesto, y buscas un buen sonido, yo empezaría
por estudiar todo lo que pudiera sobre acústica, y como mejorar
la sonoridad de una habitación. Invierte tu dinero en eso. Una vez
que hayas eliminado ondas estacionarias y reflejos parásitos, empieza
a buscar puntos débiles en tu sistema que puedas eliminar. Probablemente
lo primero serán los altavoces. Lo último que yo miraría sería
el cableado, ya sea de conexión entre las partes del equipo o con
los altavoces (Un Truco: El mejor cable para altavoces es el
cable de red categoría 5, enrollando los hilos del mismo color entre si.
Puedes añadir más cable si necesitas mas longitud, o trenzarlos entre
si para formar un único cable).
¡Espero que esto le sirva de ayuda a alguien!
¡Gracias , Aaron! Como nuestros lectoras ya sabrán, he estado batallando
con la revista Stereophile Magazine, que promociona toda clase
de cacharrería excéntrica y no da muestras de distinguir entre
clamorosas estafas y afirmaciones dudosas en sus páginas. Los intentos
de que se involucraran en la realización de pruebas doble ciego -incluso
con el premio de un millón de dolares de la fundación como aliciente, en
caso de conseguir resultados positivos- sólo consiguieron que salieran
corriendo como alma que lleva el diablo.
Analicemos esto por un instante, amigos. Nos comprometemos legalmente
a entregar un premio de un millón de dolares
a la revista Stereophile
Magazine, o a cualquier otro promotor o vendedor de estas insensateces,
simplemente por ponernos de acuerdo y realizar una serie de pruebas
sencillas y definitivas, que demostrarían más allá de toda duda
sus creencias y/o afirmaciones. ¡Un millón de dolares! ¿Puede estar más claro?
Me parece a mí que la única explicación para esa desgana es que
saben perfectamente que no tiene razón, que lo que afirman es insostenible y que
el producto o servicio que ofrecen es un vulgar fraude -y a pesar de ello,
siguen ofreciendo estas engañifas a sus clientes, conscientes de su falsedad. No
se me ocurre ninguna otra alternativa.
Me divirtió bastante leer una crítica en la revista a mi persona y al premio
del millón de dolares de la Fundación Randi, un artículo que se basa
principalmente en el hecho de haberme cambiado el nombre legalmente, para
que se ajustara a las necesidades del mundo del espectáculo. No se me ocurre
mejor razón para rechazar el premio. Pueden leer la crítica aquí:
http://www.stereophile.com/artdudleylistening/1104listening/index1.html.
Busquen la palabra “Randi”.
CSI da un paso adelante
John Banghart, del Centro para la Seguridad de Internet (The Center
for Internet Security), nos comenta:
Acabo de terminar de leer la última columna, concretamente
el artículo sobre el programa de televisión Numb3rs. No
he visto esa serie, pero la que si suelo seguir es C.S.I.
La semana pasada, o quizás la anterior, emitieron un
episodio en el cual un psíquico, el cual había tenido visiones
de su propia muerte, supuestamente condujo a un
investigador a encontrar un cadáver enterrado.
Uno de los integrantes del equipo de CSI cree en el, y otro no. Al final
del capítulo, se hace patente que los fenómenos psíquicos fueron
el resultado de una coincidencia junto con el poder de la sugestión, y
queda perfectamente claro en la última escena. Me alegró que siguieran
esa camino, cuando resultaba tan fácil ir por el otro.
Dado que C.S.I. es una de los programas televisivos de más éxito
en los E.E.U.U. creo que podría ser interesante comentar
su compromiso con la realidad en su próximo comentario. La postura
del programa parece ser la de nunca retroceder.
El año que viene, parece ser, Malasia enviará un astronauta musulmán
al espacio, mediante una colaboración con el programa espacial ruso.
Esto trae aparejado algunos problemas para los esfuerzos del gobierno de Malasia de
promover lo que ellos llaman el Islam Hadhari, o Islam civilizado. Esta
variante anima a los musulmanes a adoptar la educación, la ciencia y la
tecnología. No se dice nada, sin embargo, sobre el asunto de la igualdad
para las mujeres y otros aspectos básicos.
Dado que la jornada habitual para un astronauta suele ser muy laboriosa, y
sabiendo que un musulmán en órbita en la estación espacial puede confundirse
por experimentar más de una docena de amaneceres y
atardeceres en 24 horas, cada uno con su correspondiente oración, parece
que se va a encontrar realmente agobiado. Además, como los musulmanes siempre se
lavan antes de rezar, y el agua es una sustancia tan valiosa en el espacio, intentar
estas abluciones no sólo sería extremadamente caro, tampoco sería poco práctico sin
gravedad, con el agua dispersándose por todas partes.
Incluso después de haber afrontado estas dificultades, será realmente difícil
para el orador encararse hacia La Meca en gravedad cero. Se pueden producir
peligrosos movimientos de rotación en el cuerpo del devoto, mientras
intenta apuntar al fugaz objetivo.
Como nos comenta el lector Andrew Williams, “Parece que los Musulmanes tendrán que
evolucionar en su visión de la vida en el espacio”. Desgraciadamente, la evolución juega
en contra de los principios de la mayoría de las religiones.
El progreso tiene sus inconvenientes….
Gary ha vuelto
Dominic, del Reino Unido, nos comenta:
Gary Schwartz está haciendo sentir su presencia en el Reino Unido de nuevo.
En nuestro sistema de transporte público, el metro, se regala una
revista (The Metro). Han publicado una entrevista al Doctor Schwartz
, que se puede consultar en
http://www.metro.co.uk/weird/article.html?in_article_id=12145&in_page_id=2
Lo mejor es el siguiente extracto, donde se explica lo que es la ciencia “buena”.
Schwartz proclama que su investigación le ha llevado a lo que el
llama “el secreto de la buena ciencia: replicación y extensión”. La
teoría viene a decir que primero replicas el experimento anterior, y
luego subes otro nivel. Esta técnica ha hecho que el equipo de
investigación vaya desde simples interrelaciones de un par de médiums
a lo que ahora se conoce como experimentos de “paradigma multicentrado,
doble ciego y doble difunto”. Cada experimento tiene lugar en dos
sitios diferentes, con dos médiums y dos sujetos que nunca se
han visto entre si, y para cada difunto que el médium alegue
haber contactado, dicho difunto debe traer a otra persona fallecida
con el para verificación. Las lecturas son posteriormente
contrastadas por exactitud.
¿Verificar el experimento usando otro muerto? Es una estupidez tan
grande que no sé si reír o llorar.
Este es una nuevo ejemplo, Dominic, de como un científico, incapaz
de encontrar sentido alguno a sus datos, cambia el
protocolo -normalmente complicándolo- hasta que los resultados
parecen indicar algo. Con su cháchara confusa sobre el “paradigma multicentrado,
doble ciego y doble difunto”, Schwartz tiene tantas formas de analizar
los datos que es seguro que siempre encontrará algo para publicar.
Cree que así es como funciona la ciencia.
Léase, un poco antes, “Volvemos a visitar PEAR”, para un caso similar.
El asombroso poder de la oración
Una nota de un servicio de prensa nos informó de que
hace 17 años, ese mismo día de 1989, el presidente de Bangladesh
pidió a sus conciudadanos que rezaran para pedir el fin
de una sequía que duraba ya dos meses. Los oradores
fueron quizás respondidos unos cuarenta minutos más tarde, cuando
grandes tormentas de lluvia y dos tornados arrasaron varias
zonas rurales de Bangladesh. Más de 500 personas murieron y millares
quedaron sin hogar.
Recuerden el antiguo dicho: ten cuidado con lo que deseas; a lo mejor lo consigues.
Y en conclusión…
Tuvimos nuestra habitual jornada de puertas abiertas el último miércoles
del mes, aquí, en la Fundación, y nos sirvió para marcar el hecho de que
ya estamos de vuelta y metidos en harina de nuevo. En una sensación realmente
buena. El doctor Hal Bidlack se unirá al equipo para “Incre!ble
Aventura: Fuga del triángulo de las Bermudas” (Véase
http://www.randi.org/amazingmeeting/cruise/cruise.html) y nuestros
columnistas habituales se están poniendo en forma para el próximo
encuentro Amaz!ng Meeting, el número 5.
Comentarios
Comments powered by Disqus