Gran alboroto con el Bigfoot
Jeffrey Meldrum, de 48 años, tiene un doctorado en ciencias anatómicas y es un profesor de anatomía vitalicio en la Universidad Estatal de Idaho, un campus con 12.700 estudiantes. A sus colegas académicos les escuece el hecho de que Meldrum es también una de las autoridades más preeminentes en el Bigfoot. Eso lo convierte en un paria: sus colegas están avergonzados por lo que llaman sus pasatiempos “pseudo-académicos”, hasta el punto de haber hecho un llamamiento a la universidad para que revise su trabajo con el objetivo de revocar su puesto. Meldrum pasa la mayor parte de su tiempo en su laboratorio en el Edificio de Ciencias de la Vida, examinando cuidadosamente más de doscientos moldes de yeso de lo que que cree que son huellas del Bigfoot. Durante los últimos diez años, ha añadido su investigación aparentemente científica a un campo más conocido por los vídeos falsos y los desenmascaramientos de los tabloides de supermercado.
Meldrum señala, en un intento de validar su campo:
Solía pasar que ibas a una librería y al preguntar por un libro sobre el Bigfoot te enviaban a la sección de ocultismo, justo entre el Triángulo de las Bermudas y los OVNIs… Ahora ya puedes encontrar algunos en la sección de Ciencias Naturales.
Profesor, mis propios libros - que desde luego ninguno apoya la irracionalidad - se encuentran en las secciones de “Oculto” o “Paranormal” de la mayor parte de las librerías. Eso difícilmente implica que apoye los testimonios sobre el Triángulo de las Bermudas o los OVNIs - o sobre el Bigfoot. Esas clasificaciones de categoría las hacen los empleados de la tienda, no los académicos vitalicios. Francamente, veo favorablemente tal categorización de mis obras, ya que coloca mis libros justo donde preferiría que estén; a quienes quiero llegar es a los creyentes.
El Bigfoot se conoce en varios lugares con diferentes nombres, como Yeti, Abominable Hombre de las Nieves, Meh-Teh y Sasquatch. Se dice que mide entre dos y tres metros, que sus pies doblan el tamaño de los humanos, y que tiene un aroma notablemente desagradable. Se ha informado de su presencia en el Tíbet, Nepal, China, Siberia, Canadá y el noroeste de los Estados Unidos, pero ninguna evidencia - fotográfica, huellas o muestras de pelaje - ha pasado las pruebas más simples para demostrar que se ha descubierto una nueva especie. La leyenda está fechada siglos atrás. El folklore de los indios del norte de América incluye relatos de un hombre-mono que recorre los valles ocultos del país. “Sasquatch” es una palabra india Salish que significa “hombre salvaje de los bosques”.
El lector Eric Cline me comentó:
Todo este [alboroto del Bigfoot] me trae recuerdos de mis días de mi graduación en la escuela (de artes liberales), cuando los facultados vitalicios eran capaces de llevar a cabo agotadores proyectos sin sentido bajo la protección del sistema puestos vitalicios, ejerciendo poca o ninguna enseñanza y satisfaciendo sus más ridículos antojos.
Eric, todavía sucede. En 1973, Russell Targ y Hal Puthoff del Instituo de Investigación de Stanford – ahora Stanford Research International – escribió un informe sobre los milagros que les parecía que el mago Uri Geller les estaba mostrando. Se les ridiculizó por todas partes, y ahora los números de Geller los ejecutan niños e ilusionistas aficionados. Mira al profesor Gary Schwartz (http://www.sindioses.org/randi/randi20050408.html#cu-nto-debemos-esperar) y su posición perfectamente protegida/vitalicia en la Universidad de Arizona en Tucson. Ciertamente, su convicción de que hay por ahí timadores televisivos que afirman hablar con los muertos, ¿es un “antojo ridículo”? Mr. Cline continúa:
Nota: Este artículo dice que el professor Meldrum ha dedicado los últimos 10 años (!) a la investigación del Bigfoot, y también que está pagada por una donación de $30.000 hecha por un entusiasta del Bigfoot. Dudo seriamente que su salario y los recursos de la Universidad Estatal de Idaho que ha usado hayan quedado cubiertos adecuadamente por el equivalente a $3.000 al año (a no ser que sea un error de imprenta). En realidad, la cantidad no bastaría para un año.
Meldrum dijo que fue hace una década en Walla Walla, Washington, cuando descubrió por primera vez huellas planas de 15 pulgadas (38cm) en el bosque. Dijo que inicialmente pensó que eran un engaño, pero se fijó en las articulaciones bloqueadas y el arco estrecho - rasgos que finalmente llegó a creer que sólo podían pertenecer al Bigfoot.
¿Las articulaciones bloqueadas y el arco estrecho no podrían tallarse en madera de balsa? Esto es más que una parodia. En cualquier caso, debería felicitarse a todos los académicos de la historia que cuestionan el valor de su obra.
Bueno, quizás. Entre los disidentes de las afirmaciones de Meldrum está Martin Hackworth, conferenciante senior del departamento de física de la ISU (Idaho State University), que califica su investigación como un “chiste”:
¿Me rechinan los dientes cuando veo el Discovery Channel y me encuentro a la Universidad Estatal de Idaho y a Jeff Meldrum? Pues sí. Cree que porta la antorcha de la causa de la gente que ha sido silenciada por la comunidad científica. Se esfuerzan por salir con él en la foto. Se le rinde culto. Camina sobre el agua. Es vergonzoso.
John Kijinski, decano de Artes y Ciencias de la ISU, tiene una postura más generosa. Dice que ha habido “gruñidos” acerca de la cátedra vitalicia de Meldrum, pero ninguna petición formal de que se revise:
Es un científico honrado… creo que ayuda a esta universidad. Proporciona un tipo de discusión abierta y puntos de vista disidentes que pueden no ser populares entre la comunidad científica, pero de eso se trata la ciencia.
Un profesor de física de la ISU, D.P. Wells, se pregunta si Meldrum planea investigar también a Santa Claus, y más de 30 profesores han firmado un petición criticando a la Universidad por acoger un reciente simposio sobre el Bigfoot en el que Meldrum fue el orador principal.
El lector Cline continua:
Concluyendo, me pregunto por el nivel real de apoyo que reicbió de la legendaria científica Jane Goodall. Su supuesta aprobación [del libro de Meldrum] según se reflejó en el relato de los medios, me recuerda a una introducción que Isaac Asimov escribió para un libro sobre la explosión de Tunguska. El libro sugería que era posible que en lugar de un meteorito o un cometa, la explosión fue provocada por una nave espacial alienígena que se estrlló… La introducción de Asimov decía básicamente que, aunque le parecía una lectura entretenida e informativa con respecto a cómo parecía ser la manifestación física de la explosión, estaba en desacuerdo con la conclusión del autor.
Aún así, como señala Mr. Cline, al parecer Meldrum tiene una distinguida partidaria en Goodall, la autoridad mundialmente famosa en chimpancés africanos. Su reseña en la sobrecubierta del nuevo libro de Meldrum, “Sasquatch: la leyenda se enfrenta a la ciencia”, lo alaba por traer “un muy necesario nivel de análisis científico” al debate del Bigfoot.
Meldrum pregunta:
¿Ha muerto la teoría de la exploración? No voy por ahí predicando que el Bigfoot existe. Pongo la leyenda bajo escrutinio y mi conclusión es, absolutamente, que el Bigfoot existe.
Pero pensadlo un momento: ¿de verdad es mucho pedir por parte de Meldrum un poco de tolerancia? Creamos o no en sus afirmaciones y en su convicción, debemos sentir cierta admiración por su perseverancia. La historia está salpicada de académicos y aficionados que desarrollaron teorías por las que recibieron burla, pero más tarde se averiguó que eran correctas. La deriva continental, por ejemplo, fue el hazmerreir internacional para muchos geólogos prominentes que más tarde tuvieron que “tragarse sus palabras” - con piedras y todo. Arquímedes y Galileo, aunque apoyados por sus colegas, sufrieron las risas del público y ahora destacan como ejemplos de pensadores cuyas ideas han sobrevivido y crecido en aceptación. Pasteur les dio un soponcio a los gastrónomos galos cuando propuso lo que ahora se conoce como pasteurización; nunca olvidaré la frase de la película de Paul Muni, “La historia de Louis Pasteur” (1936), “¿Leche hervida, Louis? ¡Todo París ríe!” Alexander Fleming fue considerado un tonto por promulgar la idea de que el moho del pan podía ser la fuente de un potente antibiótico; muchos de nosotros no estaríamos vivos hoy si no hubiera perseverado en su idea. Pero ten en cuenta que el número de los que no sobrevivieron al ridículo y a la investigación superan muy, muy de lejos el número de los ganadores en este juego…
Amigos, en mi opinión, que admito de aficionado, el resumen de todo esto - dejando a un lado los vaciados de huellas, películas, historias coloristas - es: ¿qué sucede cuando muere un gran mamífero de una población numerosa? ¿Se evapora, va al cielo, se entierra a sí mismo, o qué? No existe una sola traza de piel, carne, huesos, dientes ni deyecciones - cualquiera de los cuales podría proporcionar una “huella dactilar” de ADN para establecer definitivamente, positivamente, permanentemente, la existencia de una nueva especie. ¿Cómo podría habérsenos escapado hasta el más mínimo rastro de tal cúmulo de evidencias? ¿Podemos siquiera imaginar una gran especie floreciendo, multiplicándose y sobreviviendo en áreas que son accesibles - aunque hay que reconocer que con cierta dificultad - sin dejar tras de sí algunos rastros de su existencia? ¿Qué sucede con esta evidencia?
Hasta que se responda esta pregunta, o al menos hasta que se haya estudiado con más seriedad, pienso que la cuestión es para los dilettantes científicos o para los tabloides de supermercado. Según mi punto de vista, hay tantas - y tan buenas - razones para afrontar académicamente las cuestiones de Santa Claus o del Ratoncito Pérez.
Aparato imposible
Lo admito. Como consecuencia de mis días en la radio, tengo la obsesión de saber la hora exacta. Siempre estoy mirando mis relojes, tengo relojes que se sincronizan vía radio en la oficina y en casa, y me enoja totalmente ver que los programas de televisión llegan a mi pantalla cinco segundos completos más tarde que lo indicado por mi reloj a causa de los servicios que contrato para darme acceso a canales extra. Así, cuando la semana pasada desde la contraportada de la revista Time mi ojo se vio atrapado por un reloj Jaeger-leCoultre – su modelo “Reverso Squadra Chronograph GMT” – le eché un vistazo, y le encontré pegas. Como puedes ver en la ilustración, no es Timex, ni está en esa escala de precios. Aunque todavía no está disponible, se venderá por $7.600. Más bien lejos de mis posibilidades económicas, te lo aseguro.
Pero lo que de verdad cautivó mi mirada escrutadora fue el hecho de que quienquera que diseñó este anuncio podría estar más acostumbrado a usar un reloj de arena o uno de sol que un reloj mecánico. Esto es el resultado de un artista que eligió la disposición más agradable de las agujas, al margen de si estaba representando una imagen realista. El reloj mostrado no puede existir.
Dejaré a mis lectores que descubran por qué digo esto. Hay tres razones importantes. Vamos a ver lo que decís vosotros, amigos curiosos. Puedes ampliar la ilustración para examinar el aparato con más detalle. Si quieres enviarme tus observaciones, envíalas por favor a randi@randi.org y pon en el asunto: Watch Puzzle.
A propósito, este anuncio en TIME - que cuesta más o menos $200.000 - lo insertó Neiman Marcus. Cuando consulté su sitio en internet en busca de información, me encontré con que en la sección de “relojes para hombre” no tenían nada de Jaeger-LeCoultre como “diseñadores”, y cuando me puse en contacto por teléfono con el distribuidor local para preguntar por el reloj, ¡nunca habían oído hablar de él! ¿Es posible que se trate de una broma carísima que le están gastando a Neiman Marcus…?
China sigue engañada
El lector Todd R. Brereton, que vive actualmente en China, nos cuenta que quizás en ese país la ley no se hace cumplir como deseábamos en http://www.sindioses.org/randi/randi20061027.html#un-paso-bien-dado-en-china:
[Recientemente] dijiste que la publicidad engañosa se había prohibido en radio y televisión a partir del 1 de agosto. No hablo chino lo bastante bien para entender la poca televisión china que veo, pero reconozco el esperpento cuando lo veo, y lamento informarte de que aún sigue presente por todas partes por aquí, a pesar de la ley. Algunos ejemplos:
Las mujeres pueden comprar un artilugio en forma de top (el Qian Hi Ting) que se ajusta sobre el sujetador y empuja sus pechos hacia arriba, mejorando de esta forma el tamaño de su busto. Pero también pretende incrementar de verdad el tamaño de los pechos femeninos presionando sobre un punto-de-presión donde se une el pecho con la caja torácica a ambos lados del pecho. Algo acerca de incrementar el flujo sanguíneo…
Los niños con problemas de visión pueden usar la máquina de visión Yanbaomu, que utiliza la tecnología de la era espacial y los puntos de presión chinos alrededor de los ojos. Modifica instantáneamente el cristalino y la córnea para mejorar la visión y corregirla hasta la perfección ¡e incluso mejor! Evidentemente no funciona con adultos. Qué raro.
Hay una loción para aclarar la piel que transforma la piel oscura, mate y amarillenta de los asiáticos en una piel lustrosa, luminosa y de aspecto caucásico casi instanténeamente. ¡También es genial para eliminar marcas de nacimiento y ojeras! ¡Totalmente natural!
Finalmente, el gel “vitamina milagrosa” Vital Essence para eliminación de cicatrices, borra las cicatrices quirúrgicas, estrías e incluso los signos de intento de suicidio, ¡en sólo siete días! ¡Recomendado por médicos!
Así que, Randi, no todo está bien aquí en China, y un buen movimiento no va a ninguna parte si no se fuerza su cumplimiento. Tu informe señala que la nueva ley se supone que “se va a aplicar estrictamente”. Qué bonito sería.
Sería interesante ver si todos esos productos siguen a la venta. Al buscar el aparato “Yanbaomu”, por ejemplo, encontré que muchos de sus sitios de internet lo daban como “descatalogado”…
Me doy cuenta de que dos de los ejemplos dados dependen de la aceptación de las centenarias creencias chinas en la medicina tradicional, que postulan “puntos de presión” ficticios que se cree que encuentran por todo el cuerpo. Esta es una tradición muy arraigada, y su erradicación puede llevar mucho tiempo. Sin embargo, debo coincidir con nuestro lector que, dos meses largos después de que esta ley supuestamente haya entrado en vigor, no parece haber sido respetada adecuadamente. También debemos tener en mente que todo depende de la perspectiva de las autoridades locales que están a cargo de la verdad o ficción de cualquier afirmación o anuncio dado. Quizás tengamos que ver otra generación entes de que este paso adelante se consolide.
Sobre la bondad
Acaban de llegar noticias sobre el Dr. Daniel C. Dennett, que nos habló en el TAM4. Es profesor de Filosofía en la Universidad Tufts, en Medford, Massachussets, y autor de - su última obra - “Rompiendo el hechizo: la religión como un fenómeno natural” [http://www.amazon.com/dp/067003472X]. Hace sólo unas semanas, ingresó para una intervención de urgencia por una “disección de la aorta”, y se le colocó un reemplazo de Dacron con un válvula de fibra de carbono que - nos informa - hace un satisfactorio chasquido que le permite saber que está funcionando. Confidencialmente, yo prefiero el modelo silencioso…
El Dr. Dennett no parece haber ralentizado su ritmo por este suceso. Mientras se recupera, se las ha arreglado para sacar un ensayo titulado “¡Gracias a Dios!” que se peude ver completo en http://tinyurl.com/y7jb9y. He aquí un párrafo que he seleccionado de su artículo, para despertar tu apetito:
En otras palabras, mientras que las religiones pueden servir para un buen propósito permitiendo a mucha gente sentirse cómodos con el nivel de moralidad que pueden alcanzar, ninguna religión aplica a sus miembros los altos niveles de responsabilidad moral del mundo secular de la ciencia y la medicina. Y no estoy hablando sólo de los estándares “de la cima” - los aplicados entre los cirujanos y doctores que toman decisiones a vida o muerte cada día. Hablo de los estándares de concienciación seguidos también por los técnicos de laboratorio y personal de cocina. Esta tradición deposita su fe en la aplicación ilimitada de la razón y la investigación empírica, comprobando y re-comprobando, y adquiriendo el hábido de preguntar “¿qué pasa si me equivoco?” Los llamamientos a la fe o a la militancia no se toleran jamás. ¡Imagine la acogida que recibiría un científico si intentase sugerir que otros no pueden repetir sus resultados porque no comparten la fe de los miembros de su laboratorio! Y, para volver a mi asunto principal, a la bondad de esta tradición de la razón y la investigación abierta es a la que agradezco estar vivo hoy.
¡Bien dicho, Dr. Dennett! Debo decirle que tengo un respeto abrumador hacia esa buena gente de mi hospital local, Broward General, aquí en Fort Lauderdale, que trabajaron tan diligentemente para permitirme sobrevivir a mi reciente encuentro con problemas cardiacos, y que quizás me ha hecho demasiado sensible a cierto problema en el que he reparado recientemente. Hago ejercicio habitualmente en su gimnasio, y al pasar por el recibidor principal del hospital, he visto un surtido de literatura curanderil esparcida por sillas y mesas. Muchas de las personas en ese lugar están leyendo ese material, que está en inglés, español y francés haitiano - para captar a un amplio espectro de quienes van buscando verdadera asistencia médica. La mayoría del material lo distribuyen los Testigos de Jehová, y lanza invectivas contra las transfusiones de sangre y los trasplantes de órganos - por supuesto. Otros folletos y panfletos promueven la homeopatía, aparatos magnéticos y una gran variedad de artilugios mágicos - todo ello curanderismo. Los pacientes y sus allegados están sujetos a este bombardeo de desinformación, buena parte de él dirigido contra los principios y prácticas del propio hospital. Cuando alerté al personal del mostrador de información acerca de la situación, me respondieron con una sonrisa y este comentario, “Bueno, son todas obras de Dios, ¿no?”
En la ilustración que se acompaña, verás un puñado del gran número de libros que me he arreglado para recuperar del recibidor del hospital en las últimas dos semanas. Desde entonces he presentado quejas formales a la administracion del hospital, y estoy esperando respuesta.
Más preguntas de test
El lector Dan Lewandowski de Wichita Falls, Texas, tiene unos añadidos a la lista de preguntas que proponíamos la semana pasad en “Esto es un test” - ver http://www.sindioses.org/randi/randi20061103.html#esto-es-un-test.
P: ¿Cuántos cristianos renacidos se necesita para cambiar una bombilla?R: Ninguno. Ya han visto la luz.P: ¿Cuántos agnósticos se necesita para cambiar una bombilla?R: No se puede saber.P: ¿Cuántos deístas se necesita para cambiar una bombilla?R: Ninguno. Si la bombilla ya no interfiere con el mundo, ¿por qué molestarse en interferir con la bombilla?P: ¿Cuántos ateos se necesita para cambiar una bombilla?R: Ninguno. La bombilla hace lo que hace una bombilla. Puede que seas capaz de entender un mínima fracción de la teoría de la bombilla, pero si crees que sabes por qué está ahí, te engañas a ti mismo. Nos somos tan listos y probablemente nunca lo seremos. La luz de la bombilla no está ahí para servirte. No eres el gran drama alrededor del cual gira la bombilla. Simplemente da gracias por la luz que has sido lo bastante afortuando como para experimentar.
El lector Phil Kramer añade a la lista:
¿Hasta dónde puede llegar la tontería?
De parte del lector John Ruch nos llega este hilarante anuncio del catálogo Navidades 2006 “Business Edition” de la Oriental Trading Company, Inc. (Omaha, Nebraska). Amigos, uno no se puede inventar estas cosas, no importa lo ingenioso o retorcido que uno sea…
Hablando de tonterías, otro fabricante de maravillas asiático ha surgido en YouTube con demostraciones de sus poderes mágicos. Uno de mis corresponsales sugiere ingenuamente que puede haber imanes escondidos bajo la mesa (!), pero creo que todo se puede resumir más fácilmente como: “¡No prestes atención al señor que hay bajo las faldas de la mesa!”
Debes comprender una diferencia básica entre la cultura asiática y la nuestra. A los ancianos - y me ha sucedido - se les respeta mucho, incluso se les venera, en Asia. Se les conceden todo tipo de excepciones y privilegios, tanto que son prácticamente inmunes a la mayoría de las restricciones que podrían poner en cuestión su validez o su honradez. El hombre que verás en este video cae ciertamente en esa categoría, y se supone que tiene poderes sobrenaturales - lo que lo coloca mucho más allá de la posibilidad de que se dude de él o que se le examine demasiado de cerca cuando realiza una demostración en la que es la autoridad absoluta. Sería impensable para nadie del personal de rodaje el sugerir que se levante el mantel para ver si algún otro elemento podría ser el responsable de las maravillas que se muestran. En la cultura occidental, lo primero que haría cualquier investigador responsable sería insistir en que la demostración se efectúe en un lugar diferente y con una superficie de soporte diferente; eso podría terminar con una conclusión “alternativa” para el espectador, no tengo duda. Con todo esto en mente, mira http://www.youtube.com/watch?v=3JYGqVA9xc4 con tu ironía a toda potencia…
Para terminar…
La próxima semana sacaremos a la venta la Muñeca Oficial Randi. Como verás, viene equipada con un par de esposas, un juego de agujas de vudú oficiales para pincharla y una característica especial oculta que sólo podrás apreciar cuando examines la muñeca con detealle. ¡Piensa sólo en la cantidad de frustraciones que podrás resolver acribillando mi alter ego cuando lo necesites…!
Esto es demasiado divertido para dejarlo pasar. Sylvia Browne – ¿la recuerdas, la vidente que no podía encontrarme porque no sabía usar una guía telefónica? - ha sacado otro libro, este prometiéndonos revelar cómo celebran los ángeles del cielo el 25 de diciembre - como si esa fuera de veras la fecha nacimiento de Jesucristo. Dice la reseña:
Sylvia y su hijo Chris exploran la forma que tienen los espíritus, ángeles y Dios de celebrar la navidad en el cielo. Se tratan preguntas como ¿Hay intercambio de regalos? ¿Los espíritus celestes decoran? y ¿Cómo se honra a Jesús?, así como la idea de entregar regalos del corazón, como hacen los espíritus y ángeles en el cielo, en lugar de entregar bienes comprados en las tiendas.
Como os digo frecuentemente, amigos, no puedes inventarte estas cosas. Y hay por ahí decenas de miles de incautos que leerán y de veras creerán esta patraña. También son ellos son los que invertirán en boletos de lotería y se pondrán imanes por la cabeza para alinear los pocos pensamientos que puedan surgir de vez en cuando. La Edad Oscura está regresando rápido…
Hasta la semana que viene…
Comentarios
Comments powered by Disqus